Sunday, March 2, 2014

Estoy de vacaciones! Yeey!
Eso significa que tengo mucho mas tiempo para dedicarme a mis mini-proyectos y mini-hobbies. Esto incluye la posibilidad de cumplir una promesa que hice hace mucho tiempo: hacerle un cubre-camas tejido a mi hermana menor.
Todo empezó hace muucho tiempo con un cubre-camas que hice para mi, uniendo tiras de tejido en dos agujas (que mas parecían bufandas) y haciéndoles algunos flecos. El proyecto entero me llevo casi 4 años porque lo revivía en pleno invierno y lo guardaba apenas me aburría o encontraba algo mejor para hacer.
Después de terminado ese proyecto solo acepte hacer bufandas para amigos y familiares pero siempre aclarando que yo tejo cuando tengo ganas y tiempo y que no acepto ninguna responsabilidad por entregarlos en tiempo y forma. De vez en cuando, sin embargo, alguien cae con el pedido de hacer un nuevo cubrecamas (Dios sabe por qué, con lo feo que salio el primero). Una de las personas que me hicieron ese pedido y, por lejos, la mas insistidora, fue mi hermana menor. El año pasado, después de hacerla esperar bastante, salí al mundo buscando ideas y lanas para empezarlo. Terminé comprando 2 o 3 colores y después de mucho dar vueltas decidí que esta vez lo iba a hacer en Crochet que es una técnica que nunca había usado realmente pero cuyos rudimentos había aprendido de chica durante alguno de los fines de semana que pasaba con mi abuela. Obviamente mas tardé en empezar a trabajar que en cansarme y dejar todo en una bolsa en el placard junto con el resto de mis proyectos fracasados.
Todo hubiera terminado ahí si no fuera porque la semana pasada estando de vacaciones en un Pinamar lluvioso, ventoso y 'mosquitoso' y obligada a pasar el día encerrada leyendo y mirando El Gourmet en la tele que la inspiración me ataco: hacer un cubrecama tejido inspirado en los hermosos colores que estaba viendo en los 500 programas sobre México que hay en ese canal!
Bueno, para hacerla corta esta semana empece a tejer el cubre camas. Lo estoy haciendo en cuadraditos al Crochet (tambien llamados 'Granny squares': 'cuadraditos de la abuela' en inglés) y va tener 1,40 x 1,90 m. En total tengo que hacer 140 cuandraditos y recien voy 27, así que me espera una larga travesía por los mares del tejido que les iré contando en los sucesivos posts.
Mientras tanto, acá les dejo la pagina de la que saque el tutorial.

Mil besos!





Sunday, February 9, 2014

Hace un par de años, cuando recién comenzaba la feliz moda de usar zapatos de colores no tradicionales (léase marrón y negro) me compre unos hermosos mocasines verde agua. Hoy, después de dos años de lluvias, jeans Oxford y pisadas en el micro, mis hermosos zapatos ya no son lo que eran y decidí que era hora de darles una limpieza un poco más profunda que la cepillada de rutina para lo que los lleve al zapatero. Veredicto: no Señora (¿no odian a los que abusan del 'señora'?), los zapatos de gamuza no tienen arreglo cuando se manchan. ¡Va a haber que teñirlos! 
Obviamente basto con esta afirmación para que yo me pusiera a buscar y rebuscar opciones porque, entre otras cosas, no se quedarme con la primera opinión de nada y, además, porque no quería quedarme sin zapatos verdes. Después de horas y horas de mirar videos de Youtube y comprar un limpiador para gamuza y nobuk en uno de mis viajes a Nini (de los que los que les hablaré en otros posts) me puse manos a la obra para recuperarlos. Aquí las fotos: 

Los mocasines antes de iniciar el proceso de limpieza: 



1. Lo primero que hice fue leer atentamente los pasos a seguir y juntar los materiales necesarios: mocasines sucios (y cuando digo sucios quiero decir MUY sucios), servilletas de papel para proteger la mesa, guantes de goma para proteger mis manos, el limpiador Wassington (que no Washington como pensaba yo que se llamaba) y una toalla vieja y muy rota.



2. Luego, siempre siguiendo las instrucciones del envase, use la tapa para cepillar completamente ambos mocasines. Esto se hace para sacar el grueso de la suciedad acumulada y para peinar los 'pelitos' que conforman el nobuck

3-Una vez terminada esa parte, corte la toalla en un par de pedazos (me alcanzo con un rectángulo del tamaño de una servilleta de papel para limpiar ambos). Rocié el primer zapato con el contenido del envase (hay que sacudirlo primero y luego pulverizar a 10 cm hasta mojar la superficie) y lo frote enérgicamente.


5-Repase el interior con un pedacito de toalla humedecido en agua con jabón 


6- Luego puse el mocasín a la sombra en el balcón por, aproximadamente, 30 min. y repetí todo el proceso con el otro zapato.



Resultado: (el de la izquierda aun sin limpiar y el de la derecha limpio y seco) 



Resumiendo: El limpiador Wassington para Gamuza y Nobuk es muy bueno, en lineas generales, y dio muy buen resultado en mis mocasines color verde agua. Sin embargo, no fue lo suficientemente bueno para limpiarlos completamente y me parece que no me queda otra que teñirlos de marrón de manera definitiva. Lo que todavía no tengo decidido, sin embargo, es si el teñido lo haré yo o lo dejare en manos de alguien mas calificado.  Cuando tenga un rato más para pensarlo, les cuento.

Mientras tanto estoy abierta a consejos y correcciones. ¿Alguna vez tuvieron que limpiar una prenda de Nobuk? ¿Como les fue?